Por María Calderón el 13 de marzo de 2024
Este es el tercero de una serie de tres artículos sobre la violencia política en las elecciones de 2024 en México escritos por María Calderón.
Introducción
En los últimos veinte años, el mundo ha sido testigo de cambios significativos hacia una mayor igualdad de género en la política, lo que a su vez ha tenido implicaciones positivas para la democracia y la sociedad en general.
México ha sido testigo de una incorporación sistemática de la perspectiva de género, la igualdad y la paridad en la vida pública, lo que ha significado una transformación de la capacidad de las mujeres para participar en el futuro del país. El mejor ejemplo es el mandato del Instituto Nacional Electoral (INE), luego ratificado por el Tribunal Electoral (TEPJF), para que los partidos políticos garanticen la paridad de género en todas las próximas elecciones para gobernador de 2024: Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz, Yucatán y Ciudad de México.
Desafortunadamente, a medida que aumenta la participación de las mujeres en la política, también se ha producido un aumento de la violencia política que apunta explícitamente a las mujeres . El proceso electoral 2020-2021 fue el más violento contra las mujeres mexicanas.
El sistema político de México está inundado de violencia política que apunta y afecta explícitamente a las mujeres, obstruye la justicia social y obstaculiza la democracia. Los avances en la participación política femenina han encontrado resistencia ya que los hombres, los grupos de interés territoriales y las élites políticas aparentemente se sienten amenazados por el creciente poder femenino y responden con acciones violentas para defender el sistema tradicional de política para disuadir la participación independiente de las mujeres.
La violencia política de género contra las mujeres (GBPVAW) abarca comportamientos que apuntan específicamente a las mujeres debido a su género. Cuando las mujeres políticas son atacadas únicamente por sus opiniones políticas, no se trata de un caso de GBPVAW sino de desacuerdo político u otro tipo de violencia política. Los ejemplos incluyen la violencia dirigida a campañas políticas o derechos de voto, la restricción del registro como candidato político, la violencia digital, la violencia sexual, la violencia física (golpes, empujones, abusos, secuestros, asesinatos), así como la violencia económica y psicológica, como el acoso, abuso verbal, difamación y amenazas contra mujeres políticas y sus familias.
El objetivo final de GBPVAW es presionar, obstaculizar, castigar o privar a las mujeres de su derecho a participar en política. Este tipo de violencia adquiere una importancia adicional como forma de imponer el rol de género, donde el coaccionador intenta dominar y controlar a las mujeres, limitar las oportunidades y restringir sus derechos políticos. Este tipo de violencia puede afectar todo el ejercicio de la política y la toma de decisiones de las mujeres en cargos políticos. La violencia política no es exclusiva de las mujeres políticas, ya que puede estar dirigida a candidatos, votantes, personal de campaña y activistas durante y después de las campañas electorales.
DOCUMENTOS Y DESCARGAS
SOBRE EL AUTOR
MARÍA CALDERÓN
Asistente de Staff Practicante, Instituto México
María Calderón es asistente pasante del Instituto México en el Wilson Center.
https://mexicoelections.wilsoncenter.org/sites/default/files/media/uploads/documents/Gender-Based%20Political%20Violence%20Against%20Women.pdf
