Tras la puerta del poder
- El Presidente se puso como ejemplo a seguir por gobernadores que quieren competir en 2018
- Osorio Chong dice que Peña sabe que habrá resistencias a las reformas estructurales
- El secretario de la Defensa indicó que en eso de las reformas, el Presidente cuenta con las Fuerzas Armadas
Roberto Vizcaíno
El viernes pasado, en medio de los amagos y amenazas de la CNTE y la incertidumbre por la inminencia de un posible desalojo violento de maestros por parte de agentes federales en el Zócalo, en Los Pinos hubo una reunión a la que pocos prestaron atención.
Temprano comenzaron a llegar ahí el Jefe de Gobierno del DF y los gobernadores de todo el país y de todas las tendencias políticas. Pronto se enteraron del objetivo de la convocatoria.
El presidente Enrique Peña Nieto les informaría de la aplicación de un Plan de Aceleración Económica mediante el cual se les repartiría entre ellos 27 mil millones de pesos para que se los gasten en los próximos tres meses en pavimentación de calles y carreteras, o el equipamiento de hospitales o en cualquier otra obra que se requiera en sus respectivos estados, así como en el reparto de créditos a emprendedores y para reactivar a la industria de la vivienda.
El objetivo es que se gasten ese dinero de inmediato.
“El impacto de esta inversión de 27 mil millones de pesos no previstos originalmente, tendrá –estoy seguro-, un impacto muy positivo en el rendimiento y desempeño que tenga nuestra economía en este cierre del año… cuando tenemos un contexto internacional que es justamente contrario a lo que nos estamos proponiendo llevar a cabo”.
Previamente Peña Nieto reconocía que la desaceleración observada en México no sólo respondía a causas externas… sino también a internas. Y al aplicar este plan de emergencia daba por sentado que los críticos tenían razón: parte de la desaceleración se originaba en el hecho de que su Gobierno había retenido el gasto.
“Hoy estamos en la necesidad, urgencia de imprimirle aceleración al gasto público”, les dijo.
Y ante ello, “quiero ante ustedes proceder a dar las siguientes indicaciones”.
Ante el asombro de los gobernadores, Peña Nieto le ordenó ahí mismo al secretario de Hacienda, Luis Videgaray –considerado como el más duro en el manejo de los dineros-, a darles todas las facilidades “a los señores Gobernadores y al Jefe de Gobierno del Distrito Federal para la pronta y rápida ejecución de los recursos que están inscritos dentro de este programa, porque se trata justamente de que este gasto, de que esta inversión pública se lleve a cabo de forma acelerada”.
A los gobernadores les pidió instruir a su vez a sus colaboradores para que esos 27 mil millones de pesos –casi de a 10 mil por mes-, bajen efectivamente hasta las obras y programas que se tienen que realizar.
LUEGO ABRIÓ SU SUCESIÓN
Ya relajado, Peña Nieto entró en un tema para los gobernadores y el Jefe de Gobierno del DF más importante que el de los dineros: el de su sucesión.
Al parecer algunos habían mencionado que el hecho de que el presidente Enrique Peña Nieto hubiera llegado a Los Pinos por la vía de una gubernatura, establecía en los hechos un método a seguir.
Al respecto él sugirió:
“No se equivocan, aquí lo señalaron… vengo de estar justamente sentado ahí (entre los gobernadores) y seguramente eso anima a muchos de los que están ahí a otras cosas.
“Y qué bueno que así sea… yo creo que es parte del clima democrático. Ya hicimos camino, hemos enseñado camino. Y estoy seguro que anima a muchos a ver ese camino en el futuro”, dejó caer entre sonrisas nerviosas de varios.
Momentos antes había comentado que “vivimos hoy tiempos políticos distintos, donde todos en forma alguna hemos contribuido al fortalecimiento de nuestra democracia, al fortalecimiento del federalismo y que entendemos muy bien que en los tiempos de pluralidad política se hace por demás una exigencia para todos el que realmente podamos aglutinar nuestros esfuerzos en favor de la sociedad mexicana.
“Insisto, no se trata de competir, no se trata de generar privilegios a unos sobre otros, se trata de generar una gran sincronía, una gran sinergia, un esfuerzo conjunto de todos”, les indicó.
Se felicitó y los felicitó, porque independientemente de los orígenes partidarios, hayan creado entre ellos y él un ambiente de equipo.
“Hoy lo que debe convocarnos es este clima que hemos propiciado entre todos. Y por eso, yo celebro esta oportunidad de encuentro, nuevamente. Porque no es la primera vez, en esta semana, que nos encontramos” les recordó.
Se refirió luego a que en la presentación de la iniciativa de reforma hacendaria ellos estuvieron también en Los Pinos.
EL CAMBIO Y LAS RESISTENCIAS
Para el presidente Enrique Peña Nieto y su Gobierno, dijo el secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, no hay duda de que las provocaciones de la CNTE en el DF obedecen a intereses que se resisten al cambio en el sistema de la educación.
“Estamos conscientes de la transformación de México, y de que en esta transformación se generarán resistencias en la misma medida en que se afectan los privilegios, esos privilegios que impiden el crecimiento y el bienestar de la mayoría…
“Así son todos los procesos de transformación profunda; sin embargo, la convivencia pacífica y de respeto a la ley serán siempre la mejor defensa que se pueda hacer a las legítimas aspiraciones de cambio de la mayoría de los mexicanos.
“Las reformas darán beneficios y un mejor futuro a la mayoría de los mexicanos y fortalecerá a las instituciones”, señaló.
Por lo demás, agregó, el presidente Peña Nieto está comprometido con la democracia y ha instruido a todos sus colaboradores a privilegiar el diálogo y superar las expresiones de la intransigencia con argumentos y eso es lo que se hace ante la dirigencia de la CNTE.
Es por ello que desde que se aprobó la reforma educativa y sus tres leyes reglamentarias, y surgió la inconformidad de la Coordinadora se han realizado una serie de encuentro en los que ellos exigen la derogación de la reforma… mientras el Gobierno les dice claramente que la reforma no tiene marcha atrás.
Saben, dijo Osorio, que el diálogo no está cerrado ni concluido y que pueden regresar cuando así lo determinen.
MENSAJE
Dentro de este mismo juego de mensajes, el secretario de la Defensa, el general Salvador Cienfuegos aprovechó el acto de Clausura y Apertura de Cursos en los Planteles del Sistema Educativo Militar, realizado en el Colegio Militar con la asistencia del presidente Enrique Peña Nieto para dar un mensaje absolutamente político.
“México, como otras naciones, vive transformaciones, desafíos y oportunidades inéditas…con frecuencia, las inercias arraigadas han hecho difícil adaptarnos a las exigencias del presente y, en casos extremos, hasta para prever y diseñar nuestro porvenir.
“Una de las reformas más esperadas desde hace décadas en México, es la Educativa… esta reforma bien puede marcar un antes y un después para el desarrollo de nuestro país. Transformar y actualizar la educación es un compromiso de todos y debe permear a todos los niveles y en todas las esferas del acontecer nacional.
“Las Fuerzas Armadas y sus sistemas educativos nos sumamos a este cambio… el desarrollo y la seguridad de la Nación comienzan en las aulas.
“Congruentes con el momento histórico que vive nuestro país, las Secretarías de la Defensa Nacional y de Marina, alineadas con las metas contenidas en el Plan Nacional de Desarrollo, han iniciado la transformación de sus sistemas educativos; acción que es producto, también, de la exigencia social que demanda Fuerzas Armadas de tierra, mar y aire más capacitadas y mejor entrenadas.
“Ciudadano Presidente de la República: su liderazgo como Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas, nos convoca e influye para sumarnos a las transformaciones nacionales que permitirán llevar a México a su máximo potencial”.
¿Alguna duda?
