Rompecabezas
Abel Luna Espinosa
- A rendir cuentas
“HACE TRES AÑOS usted me dijo que tenía 7 millones de pesos, ahora me dice tiene 25 en puro ganado. Se dice que usted es el hombre más rico de México”, dijo el conductor del programa de televisión Hoy Mismo, Guillermo Ochoa, a su entrevistado esa mañana del 4 de diciembre de 1984, Joaquín Hernández Galicia “La Quina”, quien después respondió: “Soy un hombre próspero”, quien cuatro años después declararía ante el juez que su fortuna había llegado a los 800 millones de pesos.
}Al hacerse acompañar por más de 10 personas al estudio de televisión el periodista le preguntó que si ese despliegue de seguridad demostraba que temiera por su vida, a lo que el poderoso líder del Sindicato (Revolucionario) de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana contestó que sólo se trataba de “convencionistas”.Aquí lo importante al traer esta escena a la memoria puede comentarse que como consecuencia de esa entrevista Ochoa fue despedido de Televisa, llevándose en el camino a un equipo de 40 personas, excluyendo, entonces a su compañera en la conducción Lourdes Guerrero y al reportero Antonio de Valdés; todo ello como resultado de la molestia presidencial (entonces ocupaba Los Pinos, Miguel de la Madrid Hurtado) expresada al poderoso Emilio Azcárraga Milmo, padre del actual socio mayoritario, Emilio Azcárraga Jean, manifestando su animadversión al tamaulipeco. Ello sin dejar de lado la prepotencia con la cual se condujo habitualmente “La Quina”, hasta su detención en el sexenio salinista.EN ESTOS DIAS Televisa y Telmex (del también poderoso Carlos Slim Helú) están enfrentados básicamente porque, con toda certeza, a más tardar el 9 de marzo próximo los integrantes del Instituto Federal de Telecomunicaciones, darán a conocer que ambas empresas son “dominantes” en el sector y tendrán que hacer ajustes en sus estructuras para seguir operando las concesiones recibidas de parte de la federación.Si analizamos de cerca Televisión Vía Satélite (TELEVISA) ha logrado el gran alcance económico, social y político porque mediante diversos “acuerdos” con los presidentes en turno ha logrado la ampliación de sus redes llegando a las industrias de televisión, radio, editorial, de producción, entre otras, por lo que prácticamente para nadie es extraño que sus tentáculos cubran más de 90 por ciento de los mercados de la comunicación en México y hacia el extranjero. Aparte, sin tampoco olvidar, que el emporio de Azcárraga Jean ha logrado imponer a sus anunciantes paquetes de publicidad de acuerdo con sus intereses, siempre basados sus ejecutivos en la aplicación del “raiting”. Pero el tema tiene muchas aristas y apenas empieza la batalla en donde, ciertamente, las voces de la sociedad civil no se quedarán rezagadas en la difusión de sus ideas.CON LA APROBACION del esquema de reelección para diputados, senadores y presidentes municipales, el siguiente paso es la aplicación de los mecanismos de rendición de cuentas (como ya se dio con la promulgación de la reforma constitucional en materia de transparencia, firmada el pasado día 7 por el presidente Enrique Peña Nieto, quien dijo textualmente que “la población tiene derecho a saber cómo y en qué se gastan los recursos de los mexicanos; cómo deciden las autoridades y cuáles son sus resultados”. Ahora, como se prevé en el nuevo ordenamiento constitucional, “todos los organismos e instituciones que reciben fondos públicos o que realizan algún acto de autoridad serán sujetos obligados a transparentar el ejercicio de esos recursos”.Muy importante y trascendentales serán los pormenores derivados, en la práctica, de estas decisiones porque, como señaló el Titular del Ejecutivo federal, una población informada tiene las capacidades para el mejoramiento de su participación en las decisiones públicas.Centralmente, dada la vorágine observada en el Congreso, los legisladores tendrán que atender las llamadas leyes secundarias en diversas materias, entre ellas la político-electoral, la de telecomunicaciones, la educativa y la energética, pero sin soslayar que la trascendencia de este punto radicará en dotarle a los ciudadanos de elementos de juicio (por ejemplo a través de los informes de actividades, periódicos, claros y suficientemente difundidos) para la integración y conocimiento de si sus representantes están cumpliendo con las promesas de campaña o se han quedado atrapados en otros intereses, dentro o fuera de las cámaras.El siguiente punto, sin duda, al que tendrán que enfrentarse en San Lázaro serán los detalles reglamentarios en la aplicación de figuras como el referéndum, el plebiscito, la consulta, y , en dado caso, la de revocación del legislador(a) en cuestión por no haber cumplido a sus conciudadanos.
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