Con la aprobación del Senado de la República a las reformas de la Cámara de Diputados para meter a control y regularizar a las cajas de ahorro por parte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), se aseguran los ahorros de amas de casa, campesinos, migrantes, pensionados y de todos aquellos ciudadanos que se encuentran marginados del sector financiero.
Con las modificaciones a la Ley Préstamo y reforma diversas disposiciones de la Ley General de Sociedades Cooperativas, la Ley de Ahorro y Crédito Popular, la Ley de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y la Ley de Instituciones de Crédito, y creación de la Ley para Regular las Actividades de estas Sociedades de Ahorro y Préstamo, la CNBV podrá ordenar la disolución y liquidación de este tipo de organizaciones que han cometido robos a miles de familias de regiones pobres.
El senador del PRD Benjamín Robles Montoya dijo que era necesario esto, porque, advirtió, actualmente persisten las estafas de organizaciones y el problema es tan grave que es imposible conocer el número exacto de ahorradores engañados, pero se estima que “lo robado a estas familias asciende aproximadamente a 25 mil millones de pesos”.
Tan sólo en Oaxaca, aseveró, el monto del fraude cometido por las cajas de ahorro es superior a los cuatro mil millones de pesos y afecta a más de 40 mil familias.
El dictamen precisa que los trabajos de consolidación de las sociedades cooperativas sean apoyados por el fideicomiso conocido como FIPAGO y se realicen por “expertos en finanzas populares”, y no sólo por consultores internacionales con recursos provenientes de organismos extranjeros.
De igual forma, se amplía el universo de sociedades sujetas al apoyo del FIPAGO, además de contar con un marco normativo que promueva un desempeño adecuado de las cajas de ahorro en el sector financiero.
Uno de los aspectos relevantes de la reforma es apoyar a los socios ahorradores de las denominadas cajas o cooperativas de ahorro y préstamo con activos mayores a 2.5 millones de Unidades de Inversión (UDIS), que no han logrado su autorización o que se encuentran imposibilitadas por su precaria situación financiera a devolver el ahorro de los socios.
Asimismo, se permite que, además de las sociedades cooperativas de ahorro y préstamo, participen otras personas en la cesión de activos y pasivos de estas organizaciones, con el fin de incrementar las opciones para apoyar a los ahorradores.
Con estas medidas, los senadores consideraron que se amplían las posibilidades de acceder a los esquemas de apoyo que otorga FIPAGO, se fortalece el control sobre estas sociedades que tienen un nivel de operaciones básicas y se concluye ordenadamente el proceso de regularización de aquellas cajas de ahorro con activos superiores a 2.5 millones de UDIS
También se establece un mayor control sobre la creación de sociedades cooperativas de ahorro y préstamo, pues los socios deberán acreditar su identidad y ratificar su voluntad de constituir este tipo de organizaciones ante notario público, quienes estarán obligados a informar al Comité de Supervisión Auxiliar dentro de los 20 días siguientes de dicha constitución.
Se faculta a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores para que pueda ordenar la medida precautoria de inmovilizar los recursos de personas físicas o morales que realicen operaciones reservadas a las sociedades cooperativas de ahorro y préstamo, con el fin de salvaguardar los ahorros de los socios depositantes.
El presidente de la Comisión de Fomento Económico, senador José Ascención Orihuela Bárcenas, dijo que existe una urgente necesidad de acabar con las “prácticas abusivas que desgraciadamente se continúan cometiendo en contra del patrimonio de muchas familias, principalmente, de los sectores más vulnerables de la sociedad”.
El legislador del PRI precisó que a través de FIPAGO se apoyará a todas aquellas cajas de ahorro, con activos superiores a 12.8 millones de pesos y que no hayan obtenido un dictamen favorable de la CNBV para seguir funcionando, a concluir sus esquemas de resolución o salida.
Al respecto, el senador priista Gerardo Sánchez García expuso que con esta reforma, aquellas sociedades de ahorro que no puedan seguir realizando operaciones, podrán “tener una salida ordenada, a fin de evitar que los ahorradores sean defraudados y proteger sus ahorros”.
El senador del PAN Carlos Mendoza Davis destacó que las cooperativas de ahorro y préstamo constituyen una opción financiera para más de seis millones de mexicanos y que en este sentido se tienen contabilizadas 663 entidades de este tipo que poseen activos de alrededor de 96 mil millones de pesos.
Advirtió que la crisis financiera global se debió, principalmente, a que se permitió que la ambición personal estuviera por encima del interés público y ante este antecedente es necesario facilitar la salida del mercado de las sociedades cooperativas que no cumplen con los requisitos legales para operar.
La minuta reforma la Ley que crea el Fideicomiso que Administrará el Fondo para el Fortalecimiento de Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo y de Apoyo a sus Ahorradores, así como la Ley para Regular las Actividades de las Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo. El documento se envió al Ejecutivo federal para su promulgación.
Durante la discusión en comisiones unidas de Hacienda; de Fomento Económico; Estudios Legislativos, el senador del PRD, para prepara el dictamen, Armando Ríos Peter enfatizó que caso de la acción criminal de varias cajas de ahorro se vivieron en la montaña de Guerrero, en donde una caja de ahorro, que se llama Productos Amor, defraudó alrededor de 13 mil familias que implica cerca de 700 millones de pesos.
“Entonces no es una cuestión menor, no son pocos los afectados, es una situación realmente preocupante”, comentó.
Francisco Domínguez Servién, PAN, dijo que acaba de vivir un caso cercano en Querétaro, donde otra caja de ahorro, que se amparó para seguir operando, recibió los depósitos de 11 mil 500 familias de sus ahorros durante 30 años y a pesar de que hubo avisos de la Comisión Nacional Bancaria, una denuncia de la PGR, que cumplía en términos de la ley, pues se declaró en quiebra y se perdió el dinero.
Sólo el 20 por ciento de los ahorradores tuvieron satisfacción y el 80 por ciento no, porque rebasan los 200 mil pesos de ahorro. O sea, el 80 por ciento están sufriendo hoy lo que ya no les ampara la ley”, señaló.
