El diputado federal por Guanajuato, Miguel Alonso Raya exigió cero impunidad en los casos comprobados de sacerdotes y maestros que han cometido abusos sexuales en contra de infantes en la entidad, al tiempo que opinó que debe desplegarse toda una campaña de educación sexual entre la ciudadanía y en las escuelas para combatir este tipo de agresiones.
“No basta con que castigues los casos, que no los dejes impunes, también se requiere de una política de educación, formación y preparación de la ciudadanía y en lo particular de los estudiantes, para prevenirlos contra la violencia y la agresión sexual”, consideró.
“Mientras que se ande prohibiendo la educación sexual, como en el caso de Guanajuato, al grado de arrancar en las escuelas las hojas de los libros que abordan estos temas, actos promovidos por organizaciones religiosas o de padres de familia, nunca será posible avanzar en ese sentido”, señaló.
La Diócesis de Celaya informó que Fernando Ortiz García, sacerdote del templo de San Luis Rey, en el municipio de San Luis de la Paz, que luego de ser acusado de abusos sexuales en contra de una menor de 14 años fue removido a Dolores Hidalgo; se encuentra inhabilitado del ejercicio de su ministerio. Además dio a conocer dos casos más de sacerdotes que también son investigados por cometer abusos sexuales.
La Diócesis pidió una disculpa por estos abusos.
Por su parte, la activista Iovana Rocha, ha denunciado un incremento en la violencia sexual contra estudiantes.
Al respecto, Alonso Raya opinó que “se tiene que acabar con la impunidad, no podemos permitir que la iglesia simplemente cambie, a los sacerdotes acusados de abuso sexual, de una iglesia a otra y con eso pretenda salvar el problema. Lo mismo se hacía desde el punto de vista sindical con los maestros que cometían ese tipo de atrocidades, los cambiaban de una escuela a otra y hasta ahí quedaba”, denunció.
El diputado recordó que hay una iniciativa presentada para castigar con más severidad estas agresiones, misma que incluso fue respaldada públicamente por el propio Obispo de León; y como declaración está bien, pero la mejor manera de ser congruentes es predicando con el ejemplo”, señaló.
“Y eso implicaría que los casos que se conocen de abusos sexuales por parte de diferentes sacerdotes, lo correcto es que se denuncie y se presenten a la justicia, no andar solapándolos, lo mismo con los maestros y cualquier ciudadano de la profesión de que se trate”, concluyó.
