Tópicos Legislativos
Ignacio Álvarez Hernández
Ya era tiempo que el PRI como partido en el gobierno, alzara la voz contra gobernadores de perfil caciquil como Rafael Moreno Valle, quien bajo el argumento de impulsar proyectos de desarrollo, despoja, atropella, reprime, encarcela y asesina a la población que protesta en defensa de su propiedad y entorno ambiental.
El domingo pasado el presidente nacional del PRI, César Camacho Quiroz, durante la toma de protesta de la nueva dirigencia en la entidad, aseveró que Moreno Valle, es un gobernante poco afecto a escuchar manifestaciones que no tienen signo partidista, sino ciudadanas inconformes con sus abusos de poder.
El dictadorcito que le jugo chueco al PRI, para utilizar las siglas del PAN y llegar a la gubernatura, aspirante a la Presidencia de la República en el 2018 -Dios nos libre, dirían los panistas-, desde el primer día al frente del gobierno poblano, se ha distinguido por sus actos atrabiliarios y despojos, y uso abusivo de la fuerza pública para acallar las voces que denuncian sus atrocidades.
Camacho Quiroz, sustentó que Moreno Valle, es un gobernante que pretende mostrar un mundo que no existe. Un mundo casi de telenovela, que no se compadece de la realidad que viven los poblanos. Ya era tiempo que desde el poder político-partidista y no sólo de los ciudadanos de a pie, surgiera una voz de condena contra el arbitrario “gober-bala”, que mandó al diablo 11 recomendaciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), por su criminal represión en Chalchihuapan. Bien por Don César, que dejó claro que no avala “acuerdos cómplices” entre cúpulas partidistas.
HABLANDO de gandallas del poder, tenemos el caso del gobernador del PAN en Sonora, Guillermo Padrés, de añejo perfil empresarial, que lo único que ha hecho con el poder, es utilizarlo para engordar capital y patrimonio, a costa de sus paisanos a los que no deja ni agua, como lo demuestra la presa construida en su “ranchito”.
Ah, pero porque todos callan y nadie dice esta boca es mía, ante el ilegal acaparamiento de agua en amplia zona del seco territorio sonorense, donde para acabarla de amolar, se tolera el criminal envenenamiento de sus pocas afluentes como la causada por la minera del Grupo México, de Germán Larrea, de amplios antecedentes en negocios fraudulentos.
Pues en la sesión de ayer salió el “peine”, al subir a tribuna el diputado del PAN, David Cuauhtémoc Galindo Delgado, quien no defendió a su gober Padrés, -que ya encarceló a un líder de la comunidad Yaqui, a la que también se dispone a dejar sin agua con la construcción del Acueducto Independencia-, sino demandó ley pareja para los priístas.
¿Por qué?, pues resulta que también tienen represa personal en sus “ranchitos”, el presidente del PRI en Sonora, Alfonso Elías Serrano y el ex diputado federal y actual local, Carlos Samuel Moreno Terán, por cierto cercano y protegido del “Don” de San Lázaro, Manlio Fabio Beltrones Rivera, de quien fue secretario particular… Vaya nudo de complicidades.
