Individuos encapuchados anarquistas, intentaron quemar la puerta principal del Palacio Nacional, al término la marcha nocturna de inconformes con las investigaciones oficiales en torno a la desaparición de los 43 estudiantes normalistas en Iguala, Guerrero. La puerta no se incendió porque dispone de un mecanismo anti incendio que sofoca las llamas.
La marcha partió de la Procuraduría General de la República, en donde celebraron un mitin burlándose del procurador Jesús Murillo Karam, porque éste dijo en la conferencia de prensa, en la que anunció la nueva línea de investigación, que ya no quería más preguntas porque estaba cansado.
Los manifestantes recorrieron paseo de la Reforma, Madero, hasta llegar al zócalo en donde los infiltrados de toda manifestación, los llamados anarquistas, siempre encapuchados, muy violentos, intentaron derribar la puerta de palacio nacional.
Cuando el contingente arribo a la plaza de la Constitución un grupo radical derribó las vallas en torno a Palacio Nacional y empezó a golpear la puerta principal, reportaron medios de comunicación.
Encapuchados después de hacer pintas, prendieron fuego a la puerta en dos ocasiones y desde el interior del contingente lanzaron cohetones.
La concurrencia grita: “Fue el Estado”, “La pintura se quita, la sangre no” y “Fuera Peña”, mientras otro grupo de personabas trataba de contenerlos gritando “sin violencia”.
La puerta no se incendió debido a un mecanismo anti incendios que hizo que las llamas se sofocaran.
Personal anti motines del Estado Mayor Presidencial controló la situación y dispersó a los anarquistas que lanzaron cohetes y piedras en Palacio Nacional.
