MUJERES DE PELÍCULA
Su gran oratoria y su capacidad de involucrarse en todas las luchas obreras y populares le hicieron ganarse gran popularidad.
Nace el nueve de diciembre de 1895 en el pueblo vizcaíno, de Gallarta. Su padre era Antonio, niño expósito, de ideología conservador, pues pertenecía al movimiento carlista. Su madre Juliana Gómez Pardo del pueblo de Castilruiz de la provincia de Soria.
Dolores proviene de una familia obrera con escasos medios económicos. Fue bautizada. La inscribieron con el nombre de Isidora, pero para su progenitora lo que decía el registro era un papel sin importancia, por lo que decidió llamarla con el nombre de Dolores. Fue la octava de once hijos.
El ambiente familiar era muy conservador, con lecturas piadosas. Su fortísimo carácter favoreció una devoción religiosa, que le llevó a las puertas del convento.
Dolores Ibárruri ya de mayor.
Ante la mala situación económica de su familia, en 1910, tras haber superado el curso preparatorio para ingresar en el Escuela Normal de Maestras, abandona los estudios para empezar a trabajar como costurera y sirvienta. Dolores explica esta situación de la siguiente forma:
“¿Quién podría costearme los viajes, los libros, la comida, la matricula? Me preparaba para servir como criada o casarme y convertirme en la mujer de un minero, la larga historia de mi propia familia”.
SU MATRIMONIO
Dolores se casa por la iglesia cuando tenía veinte años, el 16 de febrero de 1916, con Julián Ruiz Gabiña, que era un minero de ideología socialista. Se instalaron a vivir en Musques. Julián era uno de los líderes mineros socialistas. Esto hace que Dolores empiece a conocer el marxismo, teoría que ponía en cuestión todos sus principios católicos y tradicionalistas. Su matrimonio no fue muy feliz, debido a que Julián pasaba la mayor parte del tiempo en diligencias o en la cárcel
Se empapa con el estudio del marxismo, y lo considera como la gran herramienta ideológica para conseguir la liberación de la clase obrera.
Julián y Dolores participan activamente en la huelga general de 1917. Ambos están afiliados a la agrupación socialista de Somorrostro, pero en 1919, se unen a la escisión que se produce en el PSOE por un amplio sector de comunistas. Estos son la base de que en 1920, se funde el Partido Comunista Español, formando parte del Comité Provincial. En 1921, se unen al Partido Comunista Obrero Español y con ambas formaciones se funda el Partido Comunista de España
Un factor que impresionó a Dolores fue el triunfo de la revolución bolchevique en Rusia en 1917.
El pseudónimo de Pasionaria surge, cuando firma un artículo suyo en el periódico obrero “el minero vizcaíno” en la Semana Santa de 1918.
En 1922, Dolores es elegida delegada para el Iº Congreso del PCE y comienza a escribir en el periódico “La Bandera Roja”, que se publicaba en Bilbao.
Desde el principio de la constitución del PCE, Dolores empieza a tener puestos de responsabilidad orgánica en el partido y fue en 1930, cuando es elegida para formar parte de su Comité Central.
En 1931, encabeza la candidatura del PCE por Vizcaya para las Cortes Constituyentes republicanas, pero no sale elegida. En ese mismo año, se traslada a Madrid para formar parte de la redacción del periódico del PCE, “el mundo obrero”.
En el IV Congreso del PCE de 1932, celebrado en Sevilla, es elegida miembro del Buró Político. Es detenida en este año y procesada. Fue en 1933 cuando realiza el primer viaje a la URSS.
Se divorcia de Julián en 1933, Fruto de dicho matrimonio fueron seis hijos, un chico y cinco chicas. En 1916 tuvo a Ester, que sólo vivió tres años. Rubén nacido en 1920 y que murió con veintidós años durante la Segunda Guerra Mundial en la batalla de Stalingrado, era teniente del ejército rojo. En 1923 tuvo trillizas, Amagoia que murió al poco de nacer, Azucena que murió con apenas dos años y Amaya que le dio tres nietas. En 1928, nació Eva que murió a los tres meses.
En el año 1933, Dolores fundó la Unión de Mujeres Antifascistas.
En 1934, después del fracaso de la Revolución de octubre, viaja a Asturias para mostrar su solidaridad con los presos políticos asturianos que habían sufrido una fuerte represión. En 1935 participa en el VII Congreso de la Internacional Comunista, siendo elegida suplente del Comité Ejecutivo.
La parte más importante de su vida política revolucionaria la debemos enmarcar en la época de 1935-1939, cuando se convierte en la figura más popular y relevante del PCE.
Su gran oratoria y su capacidad de involucrarse en todas las luchas obreras y populares le hicieron ganarse gran popularidad. Sin embargo es muy atacada por los conservadores echándole en cara su promiscuidad sexual buscando su máximo descrédito.
Uno de los puntos que se le achaca a Dolores es que se dice que en la sesión parlamentaria del 16 de junio de 1936 amenazó a Calvo Sotelo con palabras como ¡Usted ha hablado por última vez”. Antes de la intervención de Dolores se produce la intervención de Gil Robles y de José Calvo Sotelo, donde denuncian los graves sucesos y desmanes que se están llevando a cabo desde el triunfo del Frente Popular.
Fue en la larga respuesta de Dolores cuando se le achacan estas palabras, posteriormente Calvo Sotelo también muere asesinado.
¿Cuál es la realidad? Dolores Ibarruri siempre negó dicha amenaza. En el diario de sesiones de las Cortes donde se recoge dicho discurso no aparecen dichas amenazas. Sin embargo algunos hombres de la derecha le acusan de haberlas pronunciado.
En las elecciones de febrero de 1936, es elegida diputada por el Frente Popular por Asturias. Desde ese mismo momento y hasta el inicio de la guerra civil, libera a los presos de la cárcel de Oviedo. En la Plaza de Toros de Madrid da un mitin que es un homenaje a los amnistiados y víctimas de la represión de octubre de 1934.
Los discursos más conocidos de Dolores Ibárruri “Pasionaria”
Llamamiento de Dolores Ibárruri por radio el 19 de julio de 1936
¡Obreros! ¡Campesinos! ¡Antifascistas! ¡Españoles Patriotas!… frente a la sublevación militar fascista ¡todos en pie, a defender la República, a defender las libertades populares y las conquistas democráticas del pueblo!
Al grito de ¡el fascismo no pasará, no pasarán los verdugos de octubre!… los obreros y campesinos de distintas provincias de España se incorporan a la lucha contra los enemigos de la República alzados en armas. Los comunistas, los socialistas, anarquistas, republicanos demócratas, los soldados y las fuerzas fieles a la República han infringido las primeras derrotas a los facciosos, que arrastran por el fango de la traición el honor militar de que tantas veces han alardeado.
Todo el país vibra de indignación ante esos desalmados que quieren hundir la España democrática y popular en un infierno de terror y muerte
Pero ¡NO PASARÁN!
Discurso de Dolores Ibárruri en la despedida de las Brigadas Internacionales de 1 de noviembre de 1938
Hasta pronto hermanos
Es muy difícil pronunciar unas palabras de despedida dirigidas a los héroes de las Brigadas Internacionales. Por lo que son y por lo que representan.
Un sentimiento de angustia, de dolor infinito, sube a nuestras gargantas atenazándolas… Angustia por los que se van, soldados del más alto ideal de redención humana, desterrados de su patria, perseguidos por la tiranía de todos los pueblos
De todos los pueblos y todas las razas, vinisteis a nosotros como hermanos nuestros, como hijos de la España inmortal, y en los días más duros de nuestra guerra, cuando la capital de la República española se encontraba amenazada, fuisteis vosotros, bravos camaradas de las Brigadas Internacionales, quienes contribuisteis a salvarla con vuestro entusiasmo combativo y vuestro heroísmo y espíritu de sacrificio.
¡Banderas de España!… ¡Saludad a tantos héroes, inclinaos ante tantos mártires!
¡Madres!…¿Mujeres! Cuando los años pasen y las heridas de la guerra se vayan restañando; cuando el recuerdo de los días dolorosos y sangrientos se esfume en un presente de libertad, de paz y de bienestar; cuando los rencores se vayan atenuando y el orgullo de la patria libre sea igualmente sentido por todos los españoles, hablad a vuestros hijos; habladles de estos hombres de las Brigadas Internacionales.
Nos os olvidaremos, y cuando el olivo de la paz, entrelazados con los laureles de la victoria de la República española. ¡volved!
¡Vivan los héroes de las Brigadas Internacionales!
Fue elegida Vicepresidente de las cortes republicanas de 1937. Poetas como Antonio Machado, Rafael Alberti, Miguel Hernández, Nicola Guillen la cantaron en sus poemas, convirtiéndose en una leyenda obrera y antifascista.
En la época de desmanes populares, Dolores salvo a las monjas de un convento. Una de ellas escribió a Dolores “Me ha parecido que le agradaría a usted saber, no sólo que su memoria perdura en el agradecido y amante recuerdo de las hermanas, sino en el cuadro de su patrona, la Virgen Dolorosa, que tiene aún una inscripción al dorso que justifica su procedencia y una tarjeta de campaña con la efigie de usted, también allí bajo la protección de Nuestra Madre del Cielo”.
Es evidente que Dolores actuó por convencimiento y sentimiento pero también porque la línea oficial del PCE de José Díaz era favorecer la restauración del orden republicano y del imperio de la ley, con la finalidad de terminar de una vez con los desmanes que asolaban el país
SU RELACIÓN CON FRANCISCO ANTÓN
Después de su divorcio con Julián inicia una relación amorosa con FRANCISCO Antón, que tenía diecisiete años menos que Dolores. Antón nace en 1912 y trabajaba de ferroviario. Llegó a la Secretaria General de PCE de Madrid Tras la celebración del 4º Congreso del partido.
Esta relación levantó gran controversia dentro del partido, puesto que las mujeres de esa época no solían tener amantes y menos la de clase baja. Todavía era menos concebible para muchos militantes comunistas, que el amante fuera mucho menor que Dolores.
Tanto desde el socialismo como desde el comunismo le pidieron que lo abandonara si quería seguir en el PCE, sin embargo se negó
Dolores protegió a Antón y lo promocionó a la dirección política del PCE. Durante la guerra civil tuvo un fuerte enfrentamiento con Indalecio Prieto, que era ministro de la Guerra en el gobierno de Largo Caballero, le hizo nombrar a Antón comisario político, cuando las fuerzas de Franco estaban a las puertas de Madrid.
Al termina la segunda guerra mundial, salen los dos exiliados, Dolores se traslada a Moscú, mientras Antón permanece en Francia, lo que hace que los nazis lo detengan y sea internado en el campo de concentración de Le Vernet. Dolores reclama a Stalin que intervenga ante Hitler para lograr la liberación de Antón, cosa que consigue, y se traslada a vivir a Moscú. Con este reencuentro se reanuda la relación.
Sin embargo, la relación se rompe y Antón vuelve a Francia. No se sabe bien cuál fue el motivo de esta ruptura, se plantean tres las causas, en primer lugar, la diferencia de edad dentro de la pareja, en segundo lugar los problemas de salud que ya presentaba Dolores y por último los problemas que acarreaba al PCE esta relación.
Ya en Francia Antón conoce a una compañera también comunista Carmen Rodríguez de la que se enamora. Fruto de esta relación son dos hijas, pero una de ellas presenta síndrome de Down.
Desde Francia el PCE desarrolla la Operación Reconquista, que consiste en la introducción en España de guerrillas, los famosos maquis, con la finalidad de desestabilizar el régimen de Franco e intentar el apoyo internacional, Esta operación resulta un fracaso. Dolores Ibárruri ante el fracaso de la misma, inicia una purga en el PCE de Francia. Acusa a Santiago Carrillo y a Antón de dicho fracaso y de no haber conseguido el levantamiento de los comunistas en el interior del país.
Se abre un proceso contra Antón que dura tres años. Santiago Carrillo empieza apoyando a Antón, pero ante la dureza de Pasionaria, acaba también cargando contra Antón
Antón junto a su mujer y sus hijas, es llevado a Varsovia, donde trabaja en una fábrica donde trabaja entre diez y doce horas diarias, con un sueldo escaso y muy justo para mantener a su familia, teniendo unas condiciones de vida penosas.
Nuevamente Antón es acusado de ser un agente secreto, puesto que su padre era policía. Todo el PCE le acusa, sin embargo interviene el propio Stalin que le perdona la vida.
El caso de Antón es reabierto en 1957, cuando ya era Secretario general Santiago Carrillo y en 1964 es readmitido en el Comité Central del PCE.
Antón se traslada a vivir a Checoslovaquia, donde apoyará las reformas que proponía Alexander Dubcek y la famosa primavera de Praga, que termino con los tanques de la URSSS.
Dolores y Antón tuvieron varios encuentros pero siempre fueron saludos fríos y protocolarios. Dolores nunca perdonó el abandono de su gran amor. Antón moriría el 14 de enero de 1976 en París. Fue una gran historia de amor y de odio.
EL EXILIO
El 6 de marzo de 1939 huye en avión desde el aeródromo de Monóvar en Alicante hacia Orán y París, en compañía de Juan Negrín, Rafael Alberti, Enrique Lister entre otros destacados miembros del gobierno, del mundo de la cultura.
Dolores Ibárruri es elegida Secretaria General del PCE en 1942 dirigiendo el partido con mano de hierro. En 1945 fija su residencia en la ciudad francesa de Toulouse junto con toda la dirección del PCE. En 1946 se traslada a París. En 1948 se traslada a Moscú pues padece una grave enfermedad hepática, lo que le hace permanecer seis años en la capital rusa. Es el momento de su ruptura con Francisco Antón.
Un hecho relevante es la ilegalización del PCE en Francia. Dolores Ibárruri participa en los funerales de Stalin en 1953. En el V Congreso del PCE que se celebra en 1954 en Checoslovaquia se confirma como Secretaria General del partido. En 1955 se traslada a la capital de Rumania, Bucarest, donde se instala Radio España Independiente. Desde 1957 a 1960, habla diariamente a través de radio Pirenaica alentando a los mineros asturianos y a l resto de obreros a la huelga.
Dolores presenta su dimisión como Secretaria General del PCE en 1960 y ocupa el cargo de Presidenta del partido. Le sustituye como Secretario General, Santiago Carrillo. Se le concede la Orden de Lenin en 1965 cuando cumple setenta años.
Dolores fue miembro del Secretariado de la Internacional Comunista junto a otros grandes líderes comunistas como Georgi Dimitrov, Palmiro Togliatti, Maurice Thorez y otros. Dolores condenó la invasión soviética de Checoslovaquia en 1968.
Tras la muerte del dictador Franco 1975, Dolores regresa a España en 1977 y se presenta a las elecciones de 1977 saliendo diputada por Asturias. Presidió la Mesa de Edad de las primeras Cortes democráticas, aunque debido a su edad su papel fue meramente testimonial y simbólico.
En 1983 participa en las manifestaciones de solidaridad con las Madres de Mayo argentinas.
Uno de los aspectos más llamativos de Dolores es que siempre iba vestida de negro.
Muere el doce de noviembre de 1989. Rafael Alberti pronuncia unas elegías sobre su figura y también pronuncia un discurso Julio Anguita, Secretario General del PCE en aquellos momentos Es enterrada en el recinto civil del cementerio de La Almudena en Madrid.
BIBLIOGRAFIA
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Vázquez Montalbán, Manuel. “Pasionaria y los siete enanitos”. 1999. Barcelona. Ed. Planeta.
