- Da prioridad a inmuebles, ladrillos y negocios en su Ley, dicen urbanistas y César Cravioto
Guillermo Pimentel Balderas
La Ley de Reconstrucción de la Ciudad de México, que envío para su aprobación el Jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), excluye a la sociedad civil en el proceso de restauración.
No se pone –en este proyecto- en el centro al ciudadano, al damnificado, al ser humano; por el contrario, la administración capitalina prioriza al inmueble, a los ladrillos y no las necesidades que van más allá de una vivienda y del negocio inmobiliario.
El grupo parlamentario de Morena en la ALDF reunió a expertos en urbanismo y medio ambiente para discutir lo que la ciudad requiere como consecuencia del sismo del pasado 19 de septiembre.
Coincidieron, estos especialistas en urbanismo y los legisladores, en que hay exclusión de la sociedad civil en el proceso de restauración propuesto por el mandatario capitalino.
En la reunión, donde se dio voz a los especialistas en el análisis de leyes de reconstrucción, el coordinador de la bancada de Morena, César Cravioto, sostuvo que la diferencia de fondo entre la Iniciativa de ley de reconstrucción propuesta por el jefe de gobierno y la postulada por su partido es que ésta pone en el centro al ciudadano, al damnificado, al ser humano.
En tanto, subrayó, la de Mancera prioriza al inmueble, a los ladrillos y no las necesidades que van más allá de una vivienda y del negocio inmobiliario. “Desconocemos la situación del ciudadano”, reclamó.
Cravioto Romero informó a los asistentes que ya mantuvo una reunión con la Secretaria de Gobierno local, Patricia Mercado, donde le planteó la posibilidad de cambiar el enfoque de esa plataforma, sin embargo, hasta la fecha no hay modificaciones ni se ha sumado información alguna.
Otro ejemplo, agregó el diputado, es que la ley le da todo el poder a Felipe de Jesús Gutiérrez de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), mientras que quedan fuera las de Desarrollo Social, Protección Civil, Obras, en fin.
“Nos preocupa sobremanera, que el gobierno mantenga una visión de negocio y no vele por el bienestar de los ciudadanos, e incluso se burle de ellos al proponerles que soliciten un crédito por 20 años, cuando ellos ya pagaron su respetiva vivienda.
Es lamentable -agregó Cravioto- que el gobierno (de Mancera) permita que se incremente el número de departamentos y de niveles en un predio que colapsó. Lo que en verdad se busca es que cuando se olvide el temblor, esas viviendas que se construyan de más, puedan ser vendidas a un precio elevado”, advirtió.
Especialistas vs Ley Mancera
Po su parte, los especialistas asistentes coincidieron en que la Iniciativa propuesta por el jefe de Gobierno excluye al ciudadano y lo más lamentable, afirmaron, es que elimina del programa de reconstrucción al damnificado.
Alfonso Iracheta del Colegio Mexiquense, sostuvo que hace falta que el gobierno central defina las zonas de alta sismicidad, de desprendimiento, de hundimientos, pues todos esos factores influyen en un desastre natural.
La Ley dijo, debería mencionar, por áreas, cuál debe ser la densidad promedio, las alturas promedio, los usos de suelo. No se trata de redensificar. Es contradictorio, aseguró, que en un lugar altamente sísmico, donde se cayó un edificio, se construya otro y además se le agregue un 35 por ciento de construcción.
Por su parte, Martha Delgado, de la fundación Pensar, Planeta, Política, Persona, calificó de increíble que no se tome en consideración a la población para la reconstrucción de la ciudad.
Laurent Herbiet, de Reconstruir MX y Sistemas Pluviales SC, destacó la importancia de dotar de viviendas a los ciudadanos afectados, pues sólo uno de cada diez trabajadores de la Ciudad de México tiene acceso a la vivienda propia.
Daniel Escotto de Infraestructura y Urbanismo criticó que la Ley de Reconstrucción del jefe de Gobierno sea un proyecto a corto plazo, en el que no hay un cambio sustancial de las estrategias de construcción.
El especialista señaló que Mancera no menciona en su ley, en ningún momento, el uso de la madera, un material que debería ser considerado para la reconstrucción, pues pesa hasta una cuarta parte de lo que pesa un edificio de concreto.
Los asistentes lamentaron que a pesar de que más de un millón de personas salieron a las calles a ayudar en el rescate, no se les tome en cuenta en la elaboración de la Ley de Reconstrucción y sólo se les informe de ésta como si fuera un hecho consumado.
El ingeniero Jorge Sánchez aseguró que el Atlas de Riesgo de la Ciudad de México es absolutamente insuficiente pues olvida que los peligros que enfrenta la capital en modo alguno se circunscriben a los sismos. Los riesgos de las inundaciones catastróficas son cada vez mayores. Y el Atlas no las toma en cuenta, agregó
Por su parte, la diputada de Morena, Aleida Alavez se comprometió a presentar las propuestas de urbanistas y ambientales en la discusión de la Iniciativa en la Asamblea Legislativa, para lograr, dijo, una Ley de reconstrucción que nos lleve a establecer la ciudad que necesitamos y merecemos.
