Juan Chávez
Solo “una hecatombe” impedirá que Andrés Manuel López Obrador sea electo presidente de México el próximo 1 de julio, ha asegurado Luis Carlos Ugalde que fuera presidente del IFE, hoy INE (Instituto Nacional Electoral).
El bipartidismo será entre Morena y el PAN, predice. El PRI, como tercera fuerza política, vivirá las de Caín. “Será necesario que se refunde” si quiere seguir figurando en la política nacional, advierte.
¿Hay que creerle? ¡Por supuesto!. Ugalde sabe un cacho de lo que está diciendo: encabezó el órgano electoral de 2003 a 2007 y en la actualidad dirige Integralia, una firma dedicada a explorar y analizar los aconteceres de la polaca totonaca.
Para el hoy analista político, la ventaja que el tabasqueño saca a Ricardo Anaya “ya es inalcanzable”.
Para José Antonio Meade que se encuentra en el incómodo tercer lugar, resultará imposible obtener el triunfo, según las predicciones de Ugalde que también ha considerado que de las 9 gubernaturas en disputa, la coalición Morena-PT-PES podrá ganar seis: Chiapas, Puebla, Veracruz, Morelos, Tabasco y CDMX.
Morena será mano también en las elecciones para renovar las cámaras de Diputados y Senadores. Estas son las cifras vaticinadas para la coalición morenista que barrerá como el PRI lo hacía en sus tiempos de gloria y de partido hegemónico:
270 diputados y 58 senadores.
Será mayoría en ambos órganos del Poder Legislativo, lo que podría abrir brecha a sus propuestas que tienen que pasar por el Congreso de la Unión y el Constituyente Permanente, por tratarse de reformas a la Constitución.
Cita Ugalde que eso lo acometerá AMLO en 2021, pero podrá hacerlo desde el 2019 si es que, como lo pregona en campaña, llega a encasquetarse la banda tricolor con las “pilas bien cargadas”.
Para que el PRI tenga oxígeno y constituya una barrera real al candidato de Morena, requiere mantener esa mayoría absoluta que detenta en 21 congresos locales que también se suman a los próximos comicios que contemplan la elección de casi tres mil 500 puestos de elección popular.
Afirmó Luis Carlos Ugalde en conferencia ante ejecutivos de finanzas:
“En conjunto, el saldo de 2018 será un apuntalamiento de Morena como primera fuerza política nacional, con una peligrosa carencia de contrapesos, ya que se anticipa que arrase en los comicios, y el Revolucionario Institucional, en cambio, enfrentará una derrota que lo arrastrará hacia un descenso inédito”.
Para cerrar, pueda ser que Morena se lleve 10 de las 27 legislaturas estatales en disputa.
Todo, resultado de que López Obrador es el único, de los presidenciables, que ha demandado el voto para sus candidatos a los gobiernos de los estados y diputados federales y estatales.
Las diferencias saltan como conejos en la campaña. Resaltan de la chistera del mago morenista. Y esto, en parábola, es la purita realidad de la cruzada electoral.
