Juan Chávez
No me cabe duda de que el Mundial de Futbol tiene bien metida la pata en las elecciones del 1 de julio en México.
A raíz del estruendoso triunfo sobre Alemania, el equipo de Juan Carlos Osorio logró lo que Meade no ha conseguido en campaña.
Por conmiseración o por simpatía, algunas encuestas lo colocan en segundo lugar y eso para el PRI es significativo porque aumenta sus esperanzas de llegar a contar con buen número de legisladores en el Congreso de la Unión.
Pueda ser que el voto duro del partido tricolor haya despertado y comience a manifestarse en esos truculentos números de las instantáneas consultas.
Como quiera, Meade, aunque sea despacito, avanza… y, claro, está peliagudo que alcance y rebase al puntero López, al que se apunta con 26 millones de votos, contra los 19 que lograría el candidato de “Todos por México” si se amaciza en el segundo lugar y desplaza a Ricardo Anaya.
De cualquier forma, en el Mundial México está corriendo el balón sobre las canchas de los estadios rusos y si el sábado vence a Corea del Sur, su segundo enemigo, sacudirá la conciencia del electorado que enfilará simpatías hacia el tradicional “nacionalismo” que absurdamente hace años todavía le era útil al PRI para sustentar su hegemónica fuerza.
Ahora, es distinto. La libre economía impulsada por Carlos Salinas de Gortari nos metió a la globalización, nos sacudimos el paternalista proteccionismo, el mismo del que se cuelga el ominoso Donald Trump para mantener enjaulados a más de 2,300 niños, separados de sus padres.
Pero el deporte de las patadas nos dará una acercadita al nacionalismo que todavía late en el corazón de millones de mexicanos y eso puede ser que eleve más la posición de Meade.
Así que hay que esperar que el equipo verde venza este sábado a los coreanos y asegure su pase a los octavos de final de la competencia mundial.
Eso molestaría a Morena, a López y a sus cercanos. Pero no importa a los que sentimos pasión por el futbol y por México nos emociona y nos anima a ir a votar con más ganas.
Y aunque en la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) también ha anidado la corrupción, lo que interesa es que México gane, que muestre al orbe que nos somos perico y que podemos colocar al deporte de los pobres en un lugar superior en la tabla de los ranckings.