DE FRENTE Y DE PERFIL
RAMÓN ZURITA SAHAGÚN
Como sucede tradicionalmente, el reparto de comisiones dentro del Senado de la República y Cámara de Diputados no satisfizo a nadie, más que los que forman parte de la mayoría.
Es claro que la poderosa mayoría que forma MORENA, apoyado por PT y PES se quedaría con las principales comisiones y repartiría las demás entre los integrantes de la chiquillada, como sucedió en el pasado cuando priistas y panistas dominaban el escenario político.
La repartición en el Senado dejo en claro la ausencia de aquellos legisladores que formarán parte del gabinete presidencial, aunque la primera baja del mismo, Héctor Vasconcelos, si alcanzó la presidencia de la comisión de Relaciones Exteriores cuyo cambio realizó por la titularidad de la secretaría de Relaciones Exteriores.
Sin embargo, los futuros miembros del gabinete como Olga Sánchez Cordero, Gobernación; Rocío Nahle, Energía y Alfonso Durazo, Seguridad Pública, además de Javier May, subsecretario, no fueron incorporados como presidentes de ninguna de las comisiones.
Quienes sí lo consiguieron fueron los polémicos Napoleón Gómez Urrutia, presidente de la comisión del Trabajo, Félix Salgado Macedonio, de la de Defensa y Eduardo Ramírez, Puntos Constitucionales.
Tampoco fue incluida Delfina Gómez, quien se ausentará del Senado, al ser la representante del gobierno federal en el Estado de México, mientras que Jaime Bonilla que hará lo propio en Baja California es presidente de la comisión de Asuntos Fronterizos y Migratorios.
Los representantes de MORENA presidirán 22 comisiones de las 46 comisiones en el Senado de la República.
Educación, Energía y Gobernación, que tendrán a su cargo probables reformas constitucionales las presidirá MORENA, mientras que al PRI le fueron dadas las presidencias de solamente cinco.
Los panistas alcanzaron ocho, Movimiento Ciudadano tres y el PES dos, como PVEM, PT y PRD.
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