José Vilchis Guerrero
Frente al fenómeno de la invasión de la privacidad en las redes sociales, que se han erigido en un tribunal que limita la libertad de expresión, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que en la primera reunión que tenga con el G-20 planteará que ninguna persona o empresa puede erigirse como ‘Censor’ o ‘Santa Inquisición’ de la libertad de expresión y manifestación en el mundo.
De igual forma, el canciller Marcelo Ebrard Casaubón, expresó que la posición de México en el tema de censura es muy clara: “No se puede admitir que una persona o grupo determine cuáles son las libertades de los ciudadanos”.
Advirtió el canciller que las redes sociales se podrían convertir en una especie de fuerza supranacional que estaría por encima del derecho para limitar la libre expresión y la manifestación de todas las libertades.
Ebrard Casaubón dijo durante la conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional: “No estamos de acuerdo, ya tenemos contacto con los que pensamos igual, Alemania, la Unión Europea, naciones de África, América Latina y países de Asia”.
Con todos ellos, se trabajará para elaborar una propuesta conjunta y rechazar esta forma de actuar de los dueños de las redes sociales que violentan derechos fundamentales de los habitantes del mundo.
“Seguimos las instrucciones de la Unión Europea, la decisión de suspender una cuenta y miles de cuentas que lleva a un estado cualitativamente diferente”.
Sostuvo que no se puede admitir que una persona o grupo determine cuáles son las libertades de los ciudadanos.
Al retomar el tema, el presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguró que no se deben usar las redes sociales para incitar a la violencia y prácticas violatorias de la ley, pero tampoco deben apoyar la censura. Omitió calificar al presidente Donald Trump a quien le suspendieron sus cuentas por incitar a la violencia.
Indicó que los gobiernos legalmente constituidos deben reglamentar, pero no las empresas como si fuese la ‘Santa Inquisición’. Es el tiempo de revisar.
Reiteró el tabasqueño que no se vale que los teléfonos se conviertan en micrófonos, pues “hay una empresa, un ente está escuchando todo”.
Por tanto, se debe trabajar al respecto, en el entendido de que México debe ser un país de libertades plenas, sin censura.
Citó al filósofo francés François-Marie Arouet mejor conocido como Voltaire, y destacó su frase “Desapruebo lo que dices, pero defenderé hasta la muerte tu derecho a decirlo”.
López Obrador refirió que la estatua de La Libertad en Nueva York, donada por Francia a Estados Unidos, “se está poniendo verde del coraje” y se convierte en un símbolo vacío debido a la censura.
