José Vilchis Guerrero
Los presidentes de Bolivia y México sostuvieron conversaciones y realizaron un primer diagnóstico sobre el litio en el país, para evitar saqueos y que la nación se beneficie de la actividad minera como ocurre en ese país de Sudamérica.
En conferencia de prensa en Palacio Nacional dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador que pronto se va tener un diagnostico general, pues expertos de ambos países ya trabajan al respecto.
Hay una concesión que reúne alrededor de seis yacimientos de litio en la región en la región de Cucurpe, que ha estado desarrollando la compañía Bacanora Minerals, que prevé extraer 17 mil 500 toneladas de este mineral que tiene aplicación en la industria de baterías para vehículos automotriz y en la electrónica.
La propiedad de esta mina está en debate y en las últimas semanas la compañía china Ganfeng Lithium decidió, en una oferta hostil, adquirir la totalidad de los derechos que tienen que ver con la extracción de litio en Sonora con una inversión de 5 mil 500 millones de pesos para comprar la mina.
Para dirimir estas controversias, dijo el presidente López Obrador, ya se hace un diagnóstico para determinar la postura de su gobierno frente a este mineral y su explotación para beneficio de los mexicanos.
“Con la visita del presidente de Bolivia, Luis Arce, se acordó que por la experiencia que ellos tienen de ese mineral que nos ayudaran a analizar qué es lo que es más conveniente para la nación.
Los bolivianos tienen experiencia en la explotación de litio, por lo cual, dijo, le encargó a Tatiana Clouthier, secretaria de Economía, establecer comunicación con las autoridades de Bolivia y ya se avanzó en un primer estudio, por lo que estima que pronto podrá exponer la política que va a aplicar el Gobierno de México.
Se trata – añadió- de una explotación nueva, no es petróleo, no es gas, no es oro, plata ni metales preciosos. No, es algo nuevo, de mucha utilidad para el desarrollo de la industria y la tecnología en varios países del mundo.
