Desde 1910 en del ejército ya se hablaba de la igualdad, «doctrinariamente la historia propia de su formación, ya hablábamos de la inclusión», cuenta la capitana.
Conforme a la evolución de la sociedad y las políticas públicas, Luna García asegura que también ha cambiado de forma sustancial el ejército la igualdad dentro de la institución.
Los cambios dentro del ejército mexicano reflejan los de la sociedad
En 2017, el nombre de la Escuela Militar de Enfermeras cambió por Escuela Militar de Enfermería como parte de las políticas que se implementaron dentro de la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena).
«Siempre ha habido hombres que nos ayudaban dentro de las actividades de enfermería. Tal vez no tenían el título, pero el hombre en las fuerzas armadas siempre ha sido fundamental para nosotras, porque sin importar la profesión, tenemos un trabajo en conjunto que nos permite lograr objetivos», dijo.
Además, la Sedena ha fomentado la inclusión a las mujeres para estudiar ingenierías, ser pilotas aviadoras e integrarse a la Escuela Superior de Guerra.
Existen 11.7% de mujeres dentro del ejército
Actualmente, hay 25,267 de mujeres dentro del ejército. Ellas representan 11.7% de las 214,157 que integran del cuerpo castrense.
«El 11.7% significa poco pero faltaría que las mujeres que están afuera de las fuerzas armadas se quisieran sumar a este trabajo de la nación, porque están las puertas abiertas para cualquier mujer que tenga una profesión en la parte civil pueda sumarse con nosotros», dijo.
Para impulsar la igualdad de género, la capitana sostiene que se imparten cursos y talleres con perspectiva de género, desde el Centro para el tratamiento integral para la perspectiva de género.
Además, se cuentan con mecanismos para atender y garantizar los mismos derechos tanto para hombres como mujeres.
Los talleres y cursos de género han impulsado un cambio dentro del ejército
De acuerdo con la también jefa de enfermería, estos talleres los toman todo el cuerpo castrense, sin importar la jerarquía.
«Este es un compromiso del ejército mexicano, el que nos den la igualdad de género y la cultura de igualdad «, agregó.
Desde su perspectiva y con una experiencia de 35 años, Ana asegura que estos talleres han impulsado el cambio dentro del ejército a diferencia de cómo lo notó ella en 1988, cuando ingresó a las fuerzas armadas.
«En 2022 puedo ver que el ejército está más profesionalizado, hay un nivel más amplio y profesional, obviamente jerárquico, pero sí podría asegurar que se trabaja ampliamente en favor de la igualdad», concluyó.
