El asesinato a balazos este lunes del reportero Roberto Toledo en el occidental estado de Michoacán, en México, conmocionó una vez más al gremio periodístico y al país, al tratarse del cuarto comunicador muerto en el transcurso del mes de enero de año nuevo.
“Hoy finalmente las amenazas se cumplen y uno de nuestros compañeros perdió la vida a manos de tres personas que llegaron y le dispararon de manera ruin, de manera cobarde. Nosotros no estamos armados, nosotros no traemos armas, nuestra única defensa es una pluma”, dijo a Efe Armando Linares, director de Monitor Michoacán, medio en el que trabajaba el periodista asesinado.
Toledo fue atacado por tres sujetos armados en el aparcamiento del edificio donde se ubica Monitor Michoacán en el municipio de Zitácuaro.
Los individuos le dispararon varias veces y él recibió dos impactos de bala en el abdomen, uno en el tórax, otro en un brazo y uno más en una clavícula.
Poco después de los hechos, el coordinador de Comunicación Social de la Presidencia, Jesús Ramírez Cuevas, dijo a través de Twitter que el Gobierno de México “condena el asesinato del periodista Roberto Toledo del portal Monitor Michoacán”.
“Trabajaremos en conjunto con el gobierno estatal y municipal para esclarecer el caso; no permitiremos la impunidad. Defendamos la libertad de expresión y el derecho a la información”, continuó
Varias líneas de investigación
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Michoacán no descarta ninguna línea de investigación en el asesinato de Toledo.
La dependencia informó de que ya realiza investigaciones para determinar si el homicidio del comunicador está relacionado con su actividad periodística o con la abogacía, ya que también era colaborador de un despacho jurídico que compartía oficinas con el medio de comunicación.
Aunque, según lo anterior, todavía no se confirma el vínculo del asesinato con la labor en prensa, el director de Monitor Michoacán atribuyó el suceso a que su medio se dedica a “exhibir corrupciones” de las autoridades y de los políticos.
En medios locales, Linares dijo que en el portal informativo había recibido “amenazas para todo el equipo” y que estas comenzaron hace un año cuando el medio “exhibió” corrupción de un exalto cargo de la Fiscalía estatal.
Samantha Osorio Castillo, de Monitor Michoacán, reportó que, al parecer, la cadena Monitor había sufrido amenazas de muerte, tras exhibir corrupciones de gobiernos, funcionarios y políticos.
Al parecer, Monitor Michoacán estaba recibiendo amenazas de muerte. Lamentablemente esas amenazas fueron cumplidas el día de hoy ya que asesinaron a uno de sus miembros sólo por hacer su trabajo.
El portavoz de Monitor Michoacán dio su pésame a la familia de Roberto Toledo y les comentó que esto no se quedará así, ya que van a llevar hasta las últimas consecuencias. Toledo perdió la vida a manos de tres personas que le dispararon.
“Le dispararon de una manera ruin, de manera cobarde. Nosotros no estamos armados, no traemos armas, nuestra única defensa es una pluma, un lapicero y una libreta”, informó el compañero del periodista mientras se le quebraba un poco la voz.
Este es el cuarto caso de periodistas asesinados en el país en lo que va de transcurso del año, siendo el de Lourdes Maldonado de Tijuana el más reciente, 23 de Enero.
