El oro negro y sus avatares en México y el mundo, llamado de unidad en LA, ante una guerra en la que se disfrazan apoyos imperiales.
Libros de ayer y hoy
Teresa Gil
El petróleo seguirá siendo uno de los temas centrales en el mundo y en nuestro país se certificará si las cifras cuadran con un peso golpeado, cuando el barril de petróleo ha repuntado por la guerra en Ucrania. México se prepara para conmemorar los 84 años de la Expropiación Petrolera en medio de los avatares económicos y judiciales de Pemex y cuando las presiones por las nuevas energías enseñan la oreja de las mismas trasnacionales del oro negro.
Vemos por otra parte a un desvalido Estados Unidos, limosneando, podría decirse, quien le dará petróleo para sustituir el de Rusia. Ya se acercó a Venezuela, aunque sus intermediarios lo niegan y hay quienes sostienen que puede buscar un acercamiento con Irán, que iba a ser la punta de lanza que ahora es Ucrania para una posible guerra de guerras hace dos años. Se busca paliar el coraje iraní, pero este país no ha olvidado que fue Estados Unidos el que se adjudicó la muerte del líder de la élite Quds, el poderoso general Qasem Soleimani. Es difícil que el país politeísta olvide que Trump aseguró haber asesinado al gran héroe sólo porque Estados Unidos no tendrá petróleo suficiente y anda buscando desesperado quien se lo provea. Parece que las famosas Siete hermanas, que siempre se mencionaron como las compañías tipo en el mundo, dejaron de ser el baluarte que tanto presumía el país del norte.
UN SUEÑO BOLIVARIANO MODERNO, PLANTEA EL PRESIDENTE DE ARGENTINA
No es exactamente el sueño de Simón Bolívar el que incluye sólo a tres países, porque él planteaba una América latina unida, pero lo defraudaron las grillas internas en cada nación. Murió desalentado en 1830 a los 47 años. El continente sureño al que se suma el México norteamericano y Centroamérica, no anda totalmente agarrado de la greña. Pese a la presión continua de Colombia contra Venezuela y algunos pleitos por límites en otros países, la unidad no es total, pero ahí va, pese a los desgarriates de la OEA y el permanente acoso de Estados Unidos (Pensamiento Bolivariano de actualidad, Universidad de Panamá 2006) La carta que el presidente de Argentina Alberto Fernández le envió a Andrés Manuel López Obrador plantea, no un panamericanismo, sino un frente común entre su país, México y Brasil, tres gigantes podríamos decir. Fernández se adelantó porque Bolsonaro, que anduvo muy cuatito con Putin antes de lo Ucrania, todavía sigue gobernando y busca la reelección. Debió de haber esperado a que los pronósticos que dan como favorito a Lula se consolidaran, para lanzar la propuesta. Pero tampoco es prematuro y se pueden unir Chile, Bolivia, Cuba y quizá Nicaragua. No es remoto que también Perú y Honduras. Como decía Edmundo Dantés: confiad y esperad.
APOYOS DEL EZLN A UNA UCRANIA ALIADA AL IMPERIO DEL NORTE
Es natural que el rechazo a la violencia sea permanente en todas las guerras. Pero la aparición de esa violencia tiene contextos diferentes. Lo nebuloso de los informes gringos que han confundido a muchos, no lo hacen con quienes tienen clara la postura de Estados Unidos y la apoyan. El volcarse hacia un país, que hizo omisión a los derechos humanos durante décadas, es dejar al futuro casos similares, en el que países satélites defiendan, siendo a su vez víctimas, a los que han sido sus mandantes. La propuesta de países, como México, de que se suspendan las hostilidades, se discuta la paz y se aplique, es lo preciso en este momento y no generar más enconos apoyando a países sin aclarar cuál fue la causa de la agresión. Es decir, atizar el fuego en apoyo a Estados Unidos. El llamado Ejército Zapatista hizo una manifestación en la que se habló de miles que nunca vimos, para apoyar a Ucrania y para no dejar, curándose en salud, se refiere a Palestina, Siria y otros países. Nada más que los dos mencionados están en agresión permanente, el primero por el gobierno de Israel, y el segundo por los grupos apoyados por Estados Unidos para enfrentar al gobierno legítimo. Pese a las décadas de agresión, el EZLN nunca tuvo tiempo para hacer una manifestación como la de ahora
