José Dávalos*
Al tomar posesión, Raúl Contreras Bustamante, nuevo director de la Facultad de Derecho, designado por la Junta de Gobierno de la máxima casa de estudios en la madrugada del martes 29 de marzo, dijo que la inobservancia del marco constitucional en el país, entre otros fenómenos, obliga a pensar que el papel social de la Facultad que ahora dirige debe reposicionarse y contribuir de mejor manera al beneficio de nuestra realidad social.
Señaló que México vive un serio problema ocasionado por una crisis del estado de derecho, por la violencia, la impunidad y la corrupción. Expresó que el reto y la necesidad más grande es hacer que se cumpla la ley sin excepciones ni distingos. Subrayó que es indispensable rescatar la cultura de la legalidad.
Planteó que el objetivo de la Facultad de Derecho es lograr educación, investigación y difusión de la cultura jurídica de excelencia. La Universidad y la Facultad de Derecho son depositarias de muchas esperanzas de mexicanos que ven en la formación de sus hijos la promesa de una vida mejor para sus familias y para la nación.
En la mañana del martes 29, en representación del rector Enrique Graue, el secretario general, doctor Leonardo Lomelí Venegas acudió a darle posesión a Contreras Bustamante. Un detalle que aplaudió entusiasmada la numerosa asistencia al acto fue que los otros dos candidatos de la terna, los doctores Carlos Humberto Reyes Díaz y Jaime Moreno Garavilla subieron al estrado y en señal de unidad levantaron los brazos del nuevo director. En ese momento resonó fuertemente en el Aula Magna Jacinto Pallares el emblemático “¡Goya!” universitario.
En nombre del rector y de la comunidad universitaria, el secretario general de la UNAM agradeció a la directora saliente María Leoba Castañeda Rivas los servicios prestados en la Facultad de Derecho.
En un libro intitulado “Historia de la Facultad de Derecho”, de un antiguo profesor de sociología de la propia Facultad, Lucio Mendieta y Núñez, aparece un discurso del eminente jurista y diputado constituyente en 1916-1917, José Natividad Macías, que fue director de la Facultad de Derecho del 28 de agosto al 19 de noviembre de 1914. Por su importancia actual, vale la pena rescatar unos párrafos de aquel valioso documento, ahora que toma el timón de la Facultad de Derecho Contreras Bustamante:
“Por otra parte, el derecho es un verdadero organismo social y como toda organización de esta clase y como el mismo cuerpo político, va afectando diversas formas, desde las más simples y rudimentarias hasta las más variadas y complejas, correspondiendo en todo al progreso, desarrollo y perfeccionamiento de la sociedad a que pertenece, pues a medida que ésta avanza las relaciones entre ella y sus miembros y de éstos entre sí, se complican, y diferenciándose de manera precisa se hacen más y más definidas y coherentes.
“Por esta razón, a cada avance social corresponde una nueva necesidad, la que exige forzosamente una nueva adaptación de la materia jurídica, pues sólo así puede lograrse el fin del Derecho, que no es otro que la realización de la actividad humana, asegurando a cada hombre por medio de la igualdad de condiciones, la más amplia libertad para el desenvolvimiento de los intereses sociales; porque no debe olvidarse que, entre los diversos factores del progreso social, el Derecho es el más importante, el que más fortifica a los pueblos, el que más los une y del que resultan y en el que deben cimentarse como fundamento inconmovible, el honor, la moralidad, la tolerancia y la probidad que, al afirmar el carácter de cada individuo, ennoblecen la vida pública y la hacen fecunda.
“Con sobrada razón ha dicho un eminente jurista contemporáneo: “Más que la libertad es el Derecho el que eleva el espíritu de los pueblos, porque hace hombres, da influencia en el exterior y la concordia y la prosperidad en el interior. Es una ilusión buscar el progreso fuera del Derecho, y el Derecho en otra parte que no sea en la Justicia”.
La Facultad de Derecho con 12 mil alumnos en los diversos niveles y 1,400 maestros, con el alto propósito de “lograr educación, investigación y difusión de la cultura jurídica de excelencia”, tiene en México y en América Latina un sitio predominante en el rango académico, en el nivel intelectual.
La vocación de los abogados es luchar por la justicia hasta alcanzarla.
