Tópicos Legislativos
Ignacio Álvarez Hernández
Estamos de acuerdo con algunas de las propuestas de modificación fiscal que impulsan los diputados del PAN, por ejemplo la reducción del Impuesto Sobre la Renta (ISR), pero mostramos desacuerdo en su pretensión de devolver beneficios fiscales de los que gozaron por años, poderosos consorcios nacionales y transnacionales.
Ello, ante la propuesta del vicecoordinador del PAN en la Cámara de Diputados, Marcelo de Jesús Torres Cofiño, quien so pretexto de grave contracción en el sector minero, en su mayoría extranjero, que de acuerdo a lo expresado por el coordinador del PRI, Manlio Fabio Beltrones Rivera, tienen utilidades diarias promedias, de 4 millones y medio de dólares.
El legislador panista por Coahuila, el estado con la mayor reserva de carbón del país, estimada en 1.17 billones de toneladas, propone la reducción de la tasa del Derecho Especial Sobre Minería, la supresión del Derecho Extraordinario sobre Minería, así como la deducción de gastos de explotación para efectos del ISR.
Con el argumento que el sector presenta efectos negativos “alarmantes”, al caer la inversión 18 por ciento en 2013, la de exploración 26 por ciento y descenso de las exportaciones 19 por ciento, el cabildero con fuero de los capitales extranjeros, señaló que los “pobrecitos” han perdido porque el precio de oro y plata cayó 22.54 y 35.48 por ciento, respectivamente.
Quizá como dijo, hay una baja tras crecimiento sostenido por 10 años, pero a qué precio. Explotación inmisericorde del subsuelo mexicano, pago miserable de menos de dos pesos por hectárea de explotación, con exención de impuestos por riqueza extraída, “fuga” de producción y utilidades, dolosa devastación del medio ambiente y, condiciones laborales parecidas a las del Siglo XIX, para los mineros mexicanos.
Seguramente la “baja”, después de 10 años de auge en las presidencias panistas, no para México y trabajadores, sino a los consorcios empresariales, no son consecuencia de modificaciones fiscales, sino de un sabotaje de esos inversionistas, frente a gobiernos débiles, incapaces de someterlos a la ley.
Último ejemplo, lo ocurrido en Sonora, donde el Grupo México, sigue extrayendo cobre y otros metales, como si nada hubiera pasado, mientras en San Lázaro, las Comisiones Especiales de Minería, presidida por el diputado del PAN, Othón Zayas Máximo y la de Seguimiento a la problemática generada por el derrame de sustancias tóxicas en el río Sonora, encabezada por el priísta chiapaneco, Willy Ochoa, le siguen haciendo al cuento.
OTRO panista, con “genial” propuesta, busca exprimir aún más el bolsillo de los mexicanos, es el presidente de la Comisión de Transporte, Carlos Muñoz Márquez, quien pretende pegar una calcomanía más al parque vehicular privado y público, ahora con una verificación de condiciones mecánicas y físicas, otro negocio privado a operar por la SCT. Puros diputados representantes de Don Dinero, no de los ciudadanos.
