Yo Campesino
Miguel A. Rocha Valencia
Pocas ocasiones nos metemos en asuntos del DF, pero ahora que los próceres del PRD se aprestan a mantener posiciones en la capital del país, luego de las desastrosas administraciones delegacionales y pésima, mediocre actuación de los diputados a la Asamblea Legislativa, pues no podemos dejar pasar la oportunidad, especialmente en delegaciones donde el bajo perfil de los “administradores” causó mayor daño y dejaron esas demarcaciones peor que como estaban.
Eso de peor parecía imposible, pero lo lograron como fue el caso de Miguel Hidalgo, Magdalena Contreras y Gustavo A. Madero, donde se careció de gobierno y los señores delegados sólo se enriquecieron pero no hicieron absolutamente nada por mejorar las condiciones de los “gobernados”.
En primer término y sólo por curiosidad sería interesante contabilizar la riqueza actual de Víctor Hugo Romo, quien con la particularidad de contar con los servicios del “golpeador”, extorsionador y presunto plagiario, Claudio Germán González, no necesitó robarse el presupuesto delegación, cuyo monto por cierto, no se encuentra por ningún lado y se “borró” del espacio cibernético.
Víctor Hugo Romo hizo fortuna gracias a los miles de permisos de construcción otorgados a lo largo de su administración y que hoy saturan la geografía delegacional, especialmente en el área del “Nuevo Polanco”, donde una sola licencia le serviría para cubrir cualquiera de las obras programadas, pero ni en eso gastó pues también atendió el negocio de los parquímetros y los permisos de funcionamiento de antros y restaurantes de lujo.
Si se “clavó” aparte algo del presupuesto es otro rollo, lo fuerte, fueron los permisos y concesiones, si no, que se remitan al Tribunal de lo Contencioso a la Administrativo donde las quejas por negar a unos y darle a otros, no prosperaron, ya que para eso contó con su bufete jurídico privado y con plaza en el gasto delegacional.
De Gustavo A. Madero, es lamentable que los “lobos” en cínica carrera se repartan los cargos y presupuestos para engordar sus carteras, incluyendo lo que se llevan por solapar el vicio y la delincuencia que a niveles de escándalo o tragedia soportan los habitantes de esta demarcación.
Ahí, otro Víctor Hugo, este de apellido Lobo, mostró hace años su incapacidad para gobernar, pero su gran afición al dinero ya que se “clavó” parte de los poco más nueve mil millones de pesos de su anterior administración, incluyendo lo que se gastó en la campaña de su protegida Nora Arias para que se quedara en su lugar y él saltara a diputado.
Hoy, la maniobra es al revés, Nora se va de diputada a la Asamblea y Víctor Hugo regresa a continuar robando en la delegación donde campea la delincuencia, especialmente aquella expresada en “tienditas” donde y giros negros donde se expende no sólo bebidas embriagantes sino también drogas de todos los calibres especialmente en colonias como San Felipe de Jesús, 25 de Julio, Nueva Atzacoalco, Pueblo de Atzacoalco, Gabriel Hernández y su ampliación, Martín Carrera, Unidad CTM, Coyol y Villa de Guadalupe, sin faltar desde luego los barrios de Cuautepec, Bajo y Alto, donde rifan bandas de asesinos y plagiarios y narcos, protegidos por la autoridad desde tiempos de Joel Ortega Cuevas.
De ahí se subrayan la Gabriel Hernández, Atzacoalco, Vasco de Quiroga, González Romero y “la Nueva” por su alto índice de criminalidad, impune desde luego dada la ausencia de los señores delegados, primero Lobo y luego Arias quien sólo aparecía de vez en vez en una foto dizque inaugurando algo inexistente.
De Magdalena Contreras, ni qué decir, lo mismo, pero con el agregado de la saturación urbana otorgando permisos de construcción sin tomar en cuenta la ausencia de servicios o vialidades que hoy convirtieron a esa localidad en intransitable y carente de vital líquido. Bueno hasta el río Magdalena o los manantiales de San Nicolás desaparecieron, lo mismo que las barrancas que eran zonas de colchón ecológico. Leticia Quesada quien incluso fue acusada de malversar, robar del presupuesto, va hoy para diputada.
¿No les parece excesivo cinismo e impunidad?
