Javier Divany Bárcenas
El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano Grijalva, condenó los atentados terroristas registrados en el Metro y Aeropuerto de Bruselas, Bélgica, donde más de 30 personas perdieron la vida la vida y más de 200 resultaron heridos.
El diputado federal del PRD saludó la actuación del gobierno federal al estar atento a la localización de mexicanos que pudieran haber sufrido daños en estos actos, para proporcionales cualquier tipo de apoyo que requieran, así como sus familiares.
Jesús Zambrano pidió redoblar la seguridad en el país, con un afán preventivo, sobre todo en estos días de asueto. En tanto el Grupo Parlamentario del PRD también de pronunció en contra de los actos terroristas.
La diputada Claudia Corichi de Movimiento Ciudadano dijo que su bancada también condena los atentados terroristas e hizo un llamado a la comunidad internacional para volver la paz a la región.
En un comunicado de prensa, la diputada de la bancada de Movimiento Ciudadano, hizo énfasis en que la comunidad internacional debe promover en el marco de las Naciones Unidas, un debate para frenar los constantes ataques terroristas, toda vez que la condena es cada vez más unánime.
Por su parte, el Senador Armando Ríos Piter señaló que la posición de México no debe de quedarse solamente en la condena, que sin duda alguna está motivada con profundidad.
Recordó que hace algunos meses se vivió el mismo episodio en Paris, y lo que ocurrió fue una acción bélica en contra de Siria, y en contra de ese espacio, en el cual lo que queda demostrado ahora con este nuevo incidente en Bruselas, es que puede convertirse en una escalada continua y de nunca acabar en materia de violencia.
Porque a final de cuentas los hechos de Paris, cuando tuvieron repercusiones de ataques directos hacia Siria, pues lo que hacen es simple y sencillamente sembrar este tipo de nuevas acciones, y en el cual -reitero- se convierte en un espiral y en una escalada de violencia.
Creo que esta tiene que ser la reflexión que lleve Estados Unidos a Naciones Unidas para generar una nueva dinámica de distensión en Medio Oriente, en donde no tengamos este cuento de nunca acabar.
