El ex presidente afirma a través de un portavoz que “los ciudadanos ejercen su derecho constitucional de manifestarse”
Silvia Ayuso | El País
Barack Obama ha roto su silencio: apoya las protestas contra la prohibición de entrar a Estados Unidos de inmigrantes de siete países de mayoría musulmana. “Están en juego los valores americanos”, ha advertido el expresidente.
Trumpy y Obama, el día de la toma de posesión. POOL REUTERS
En sus últimas horas en la Casa Blanca, el demócrata prometió mantener el tradicional respeto que se espera de un expresidente sobre las políticas de su sucesor en el cargo. Pero hizo una excepción: hablaría si veía amenazados “valores centrales” de Estados Unidos. Ese momento ha llegado cuando el nuevo gobierno de Donald Trump apenas cumple diez días en el poder que han ido acompañadas de constantes protestas ciudadanas.
Ha sido el portavoz de Obama, Kevin Lewis, quien ha revelado que el expresidente está “alentado por el nivel de compromiso que ve en comunidades de todo el país”. El día posterior a la toma de posesión de Trump, una multitud de mujeres protestó en Washington contra los comentarios machistas del presidente durante la campaña y en reclamo del respeto de los derechos de las mujeres, así como de las minorías y los inmigrantes. La prohibición de entrada a inmigrantes de Siria, Yemen, Irán, Irak, Libia, Somalia y Sudan, incluso con visado, ha provocado nuevas protestas espontáneas en todo el país desde el fin de semana.
“Los ciudadanos que ejercen su derecho constitucional de manifestarse, organizarse y hacer que sus voces las oigan los cargos electos es exactamente lo que esperamos ver cuando los valores estadounidenses están en juego”, dijo Lewis.