Alberto Cuenca
Recordó que la capital del país es parte del eje neovolcánico “y no hay ninguna alarma pero vamos a estar pendientes; se activaron los protocolos de parte de la Secretaría de Seguridad Ciudadana y de Protección Civil, pero son sismos de muy baja intensidad”, expuso Sheinbaum, quien agregó que no se esperan sismos de mayor magnitud.
“Históricamente, de 2010 a 2019 todos los sismos que han tenido epicentro en la Ciudad han sido de una magnitud muy baja, por eso no se espera que haya una magnitud mayor”, agregó, al insistir en la existencia de protocolos tanto para movimientos de baja como de alta intensidad, así como de una estrecha colaboración con el Conapred, el Sismológico Nacional y expertos de la UNAM.
De los cuatro sismos registrados esta mañana, el primero ocurrió a las 4:47 horas, con una intensidad de 2.1 grados; el segundo a las 7:38 horas con una intensidad de 2.5 grados; el tercero a las 7:51 horas con una intensidad de 2 grados y el cuarto a las 10:08 horas con una intensidad de 2.3 grados.
De estos cuatro sismos, tres tuvieron epicentro en la alcaldía de Álvaro Obregón y uno en Miguel Hidalgo.
Respecto a estos movimientos, el Servicio Sismológico Nacional acaba de emitir un informe especial, donde la institución recuerda que la Ciudad está ubicada la Faja Volcánica Trans-Mexicana (FVTM), la cual abarca desde el Golfo de México hasta el océano Pacífico en dirección este-oeste y es una de las más importantes prominencias topográficas de México.
Además, detalló que por los sismos registrados hoy se tienen indicios que la mayor parte de la actividad sísmica local se concentra en los márgenes de la Cuenca de México.
“En cuanto al origen de los sismos en la región, se piensa que son generados por el reactivamiento de antiguas fallas. También se considera que estos eventos pueden ocurrir como resultado de la acumulación de tensión regional o que el hundimiento del Valle de México podría originar tensiones que, si bien no generan propiamente a los sismos, sí pudieran dispararlos.
“También existe la hipótesis de que los grandes sismos generados en la costa pudieran dar lugar a condiciones de desequilibrio y desencadenar sismos locales. La Cuenca de México tiene una geología y tectónica compleja, por lo cual no es de extrañarse la ocurrencia de sismos de pequeñas magnitudes en la zona”, expuso el Sismológico.
Agregó que los sismos que tienen su epicentro en la zona geográfica que comprende la Cuenca de México, por su tamaño mismo, rara vez presentan réplicas.
